Uno de los múltiples datos recogidos por quienes denuncian este tipo de prácticas, se encuentran, irremediablemente plasmados, en las imágenes enviadas vía satélite y que, al parecer, afortunadamente, no son sometidas a ningún tipo de filtro, ni de manipulación, a fin de evitar que la opinión pública tenga acceso a este visionado. Dicha posibilidad no resulta descabellada, dada la ocultación y la desinformación que se desprende de una práctica encubierta, aunque no tan secreta.
La Plataforma Guardacielos, recogía datos relativos a todos aquellos compuestos detectados en estas fumigaciones, entre los que se encontraba el Litio. Una información más detallada sobre las Sales de Litio, la aportaba otra Plataforma, a través de una publicación en la que se recogen sus usos y en la que se daba cuenta de los resultados tras el análisis realizado al agua de lluvia en EE UU, después de una dispersión aérea. Según los datos publicados, el Litio se emplea - por su elevado calor específico-, en aplicaciones de transferencia de calor, (ayudaría a mantener temperaturas altas) y por su elevado potencial electroquímico constituye un ánodo adecuado para las baterías eléctricas, lo que explicaría su uso para aumentar la constante dieléctrica con fines militares.
El cloruro de litio y el bromuro de litio tienen una elevada higroscopicidad por lo que son excelentes secantes, acaban con la humedad y por lo tanto con las nubes.
Las sales de litio, particularmente el carbonato de litio (Li2CO3) y el citrato de litio, se emplean en el tratamiento de la manía y la depresión bipolar, así como en otras psicopatologías. Es un estabilizador del estado de ánimo. Sus mecanismos de acción son varios:
1. Bloquea la liberación de dopamina -bloquea la hipersensibilidad de los receptores dopaminérgicos-;
2. Bloquea resultados en la neurona posináptica -bloquea la reutilización de grupos fosfatos del trifosfato inositol que activa la liberación de calcio-; 3. Reemplaza el sodio en el canal sináptico por ser más pequeño y el potencial de acción se hace más lento, haciendo que el paciente se calme. El litio no es sustrato para la bomba sustrato sodio potasio ATPasa que impide el paso de los iones de sodio, reemplazando la concentración del sodio, lo cual en altas concentraciones puede resultar tóxico.
El litio puede ocasionar efectos secundarios. Informe a su médico si cualquiera de estos síntomas es grave o no desaparece: agitación, movimientos finos con la mano que son difíciles de controlar, sed leve, pérdida de apetito, dolor de estómago, flatulencia, indigestión, aumento o pérdida de peso, boca seca. saliva excesiva en la boca, cambio en la capacidad para saborear los alimentos, labios inflamados, acné, pérdida del cabello, molestia inusual en las temperaturas frías, estreñimiento, depresión, dolor de articulaciones o músculos, palidez, uñas o cabello delgados o frágiles, picazón, sarpullido,
Algunos efectos secundarios pueden ser graves: cansancio o debilidad inusuales, sed excesiva, micción frecuente, movimientos lentos y espasmódicos, movimientos que son inusuales o difíciles de controlar, desvanecimientos, convulsiones, desmayos, mareos o aturdimiento, ritmo cardíaco rápido, lento, irregular o fuerte, dificultad para respirar, opresión en el pecho, confusión, alucinaciones (ver cosas o escuchar voces que no existen), estrabismo, dedos de las manos y pies adoloridos, fríos o pálidos, dolor de cabeza, ruidos de golpe dentro de la cabeza, inflamación de los pies, tobillos o parte inferior de las piernas, somnolencia, temblor de una parte del cuerpo que no puede controlar, debilidad, rigidez, espasmo o tensión muscular, pérdida de coordinación, diarrea, vómitos, dificultad para hablar, vértigo, zumbido en los oídos, visión borrosa.
No se trata de ser alarmistas, pero de hace un tiempo hacia aquí, muchos por no decir todos, hemos sentido en primera persona, esos síntomas "de golpe" que antes no sentíamos.
Tras ser expuesto, el control demográfico de la población, entre los fines y usos de la Geingeniería, a través de las fumigaciones aéreas, se presenta otra vía, asociada a la Agenda climática, a través de la cual, estas prácticas irían coordinadas con los efectos vinculados a la “farsa” climática en la que se ha incluido un número de defunciones asociadas a los efectos colaterales del Cambio climático en su faceta “orquestada” por la élite que promueve esta Agenda mediante la manipulación atmosférica propiciada por estas prácticas, la cual va orientada a “simular” de un modo artificial dichos efectos, a fin de conseguir los propósitos en un tiempo récord. El número de defunciones asociadas a la supuesta contaminación antropogénica (actividades humanas), ocultaría las dispersiones en la atmósfera, a través de estas prácticas, de los compuestos y contaminantes emitidos a la misma y su relación con estos índices de mortalidad. Esto, convierte a sus promotores, junto con aquellos gobiernos participantes, en criminales en potencia, actuando en connivencia, mientras la población civil se verá reducida notablemente. La difusión de información y el paulatino adoctrinamiento, encomendado, a través de las autoridades sanitarias, relativa a la vacunación de la población, se convierte así, en la mejor “arma” con la que combatir estos riesgos y enmascarar estos crímenes “impunes” de los que ningún ciudadano tendrá conocimiento por ninguna vía convencional, a través de los Medios oficiales, al servicio de estas élites. Los grandes beneficiados de la utilización del “arma” que enmascare el genocidio, seguirán siendo los grandes laboratorios de la Mafia farmacéutica que seguirán manipulando, no sólo a través de la psicosis creada en torno a la salud, sino obteniendo grandes dividendos proporcionados desde la base que impulsa el negocio, instalada en los sistemas sanitarios primarios.
Proyectos promotores de la inversión en la energía denominada “limpia” que precisan igualmente cielos “limpios”, se presentaban en España utilizando todos los medios de difusión posible. Estas iniciativas amparadas por la Unión Europea como herramienta principal que legisla al dictado de las élites con las que se concierta la política basada en la “farsa” climática, se encuentran, junto con sus promotores, en el punto de mira por encontrarse entre el colectivo más beneficiado por el uso de la fumigación aérea clandestina orientada a la manipulación climática con fines estratégicos que estudian planificar el terreno y sus condiciones climáticas a fin de instaurar este tipo de economía en cuyos territorios las precipitaciones y las horas de sol son primordiales para hacerlas viables. Todo ello, auspiciado por la doctrina climática impuesta a la sociedad de un modo estratégicamente diseñado en el que la psicosis climática se justifica por los efectos provocados de un modo artificial derivados de este tipo de arma climática. En el caso de la referencia (foto derecha, arriba), la iniciativa coordinada por la Firma Deloitte Advisory, aúna a los socios enumerados: Diputación de Huelva; fundación Circe; Diputació de Girona; Agencia Extremeña de la Energía, AGENEX; Asociación de Agencias Españolas de Gestión de la Energía, EnerAgen; Ecoserveis; Navarra de Suelo y Vivienda (NASUVINSA) y la Asociación de Empresas de Servicios Energéticos, ANESE. Por su parte, la infantería "verde" representada en las Organizaciones denominadas conservacionistas, actúan promocionando la causa (foto izquierda, arriba) a la vez que contribuyen a la destrucción de otras economías.
La tragedia de Fukushima, Japón de 2011, oculta un atentado ecológico orquestado desde EE UU en el que las armas de Cuarta generación orientadas a provocar catástrofes terrestres juegan un papel importante. Organizaciones como Greenpeace que optan por no denunciar este tipo de atentados geoterroristas, quedan en entredicho cuando desvelan los verdaderos intereses que se ocultan detrás de sus Campañas orientadas a promover el uso de las energías renovables. El accidente de la central de Fukushima es un ejemplo del nivel que puede alcanzar el terrorismo ecológico orquestado desde las élites que combaten en el bando contrario partidario de la energía nuclear. En medio de estos dos bandos se encuentra la vulnerable población civil ajena al precio que debe pagar. Vídeo.
GEOINGENIERÍA ENCUBIERTA (FUMIGACIONES AÉREAS CLANDESTINAS) Y LA “HERRAMIENTA” HUMANA.
La opinión pública que permanece ajena y desinformada, no sólo por parte de los Medios afines a la causa de la “farsa climática”, es puntualmente adoctrinada por estos, a la vez que estimulada erróneamente por ciertas declaraciones de aquellos “personajes” que son la verdadera herramienta en muchos casos, para contribuir a apaciguar a la masa o redirigir la opinión ciudadana hacia los derroteros marcados por la élite que se oculta detrás del intencionado proyecto que desarrolla la Geoingeniería (fumigaciones aéreas clandestinas) con fines estratégicos, tal y como se constata tras unas declaraciones efectuadas por uno de estos personajes en el poder en España, el 26 de enero de 2016.
La relativa clandestinidad en la que se desarrollan estas prácticas cobra más razón de ser en su calificación de “clandestina” cuando comprobamos que estamos en lo cierto al afirmar que muchos de estos personajes permanecen en un supuesto segundo plano, a nivel de conocimiento de aquellas cuestiones que se desarrollan paralelamente a la labor que estos desempeñan de cara al público, en donde se constata que estas prácticas se desarrollan al margen de muchos aspectos legales hasta el extremo de que estos personajes deben permanecer ajenos a cualquier información relacionada con estas prácticas inmersas bajo el “top secret” del que participa en gran medida la Defensa, blindando así el acceso a cualquier dato. Aun así, este tipo de prácticas cuentan con el beneplácito de todos aquellos gobiernos en cuyos territorios se llevan a cabo, tal y como se comprueba en el caso español puntualmente recogido en documentos oficiales.
La manipulación climática (lluvias torrenciales, sequía, etc), como arma de guerra encubierta estratégicamente queda por tanto, al descubierto tras comprobar como sus “aplicaciones” son provechosamente cuidadas y mantenidas a buen recaudo al ser desarrolladas no solo con fines bélicos, sino en este caso, aplicadas a la Agenda climática, influyendo en políticas energéticas, agroeconómicas, medio ambientales, etc.
La cara B de las políticas energéticas, en este caso, muestra como detrás de la élite que promueve la energía falsamente llamada “limpia” se oculta una práctica “sucia” y otra guerra de igual calado encubierta y “de despacho”, apoyada por la mafia “verde” “sin ánimo de lucro”. Característica, esta última, que seguirá resultando efectiva, mientras sus promotores cuenten con mecanismos que hagan cada vez más opacos el destino, la procedencia y la identidad de sus cofinanciadores.
El adoctrinamiento ciudadano se desarrolla con un márketing estratégicamente diseñado utilizando la figura de personajes de este calado o incluso vinculados al ámbito eclesiástico esperando obtener de cara a la opinión pública, el mayor número de adeptos a la “causa”.
El mensaje implícito recogido en un apartado de la encíclica "Laudato si" en su Nº 63, nos da las claves para observar como cualquier dirigente o representante puede ser objeto de deseo de la élite que, en este caso, deja entrever como las aspiraciones y los fines de la Geoingeniería van encaminados a abordar cualquier técnica en desarrollo o no, dado que estas prácticas figuran como un medio alternativo ofrecido de cara a la galería para ser puesto en práctica en un futuro que, sin embargo lleva décadas desarrollándose encubiertamente y presentado ante estos dirigentes como una medida paliativa que "remedie" el daño a lo natural.
La “puesta en escena” de esta manipulación climática que viola Tratados y el proceso normal de la atmósfera sigue dando sus frutos a fin de “simular” a toda costa, las condiciones climáticas “vendidas” como la última religión a la que asirse el ser humano desinformado, responsable de los daños e indefenso, mientras las multimillonarias cifras que se mueven en la caja registradora no paran de acumular ceros a la derecha con los que "asaltar" economías de estado y domésticas por medio de Tasas que perdonen al pecador.