La cuestionada política, -llevada a cabo por el Partido Popular y su Presidente Mariano Rajoy-, tanto por la Oposición, como por la ciudadanía, informada o no, de los trasiegos políticos, sigue su curso como lo sigue un pequeño arroyuelo que no pierde su caudal, pero que, lentamente, va mermando el terreno.
La ciudadanía ignora de porqué el “verdugo” azota y agita su “fusta” y ha basado su periodo de Gobierno, en un ciclo de “recortes” sociales, económicos, de derechos fundamentales, etc.
La ciudadanía ignora que el “verdugo”, es víctima y verdugo a la vez, pero serán ya minorías las que desconozcan que la crisis con la que un gobierno ha enarbolado su política, y que les ha paralizado sus vidas, no es la crisis de la que les hablan esos “verdugos”, y el verdugo, en concreto.
Ya, a estas alturas, todos los ciudadanos de a pie, conocen el verdadero color de esa “crisis de escaparate” que el gobierno se ha encargado de presentar ante las masas como el monstruo devorador de derechos. Una crisis que los que la han fabricado, deberán tener bien preparada para envolver en cualquier tipo de papel, más bien reciclable, para presentarla al mundo en sus respectivos estados por los que deberá pasar hasta derivar en un ¡final feliz?
Los fabricantes de la crisis deberían tener preparado algún titular que haga creíble el principio, el durante y el después. Lo lamentable del caso es que, según las expectativas y la mala calidad del guion, dan a entender que dicha crisis es real, pero no es la que nos cuentan. Y, de que la misma, no desaparecerá. No solo, porque no existe, sino porque ha sido maquillada para cada tipo de público por distintos maquilladores. Por supuesto, no cabe duda, de que el fondo es del color del dinero y sus promotores y beneficiarios; los Bancos.
Pero no cualquier Banco, sino todos en conjunto, liderados por las grandes Madres de los Corderos bancarios europeos y americanos.
El “verdugo” Rajoy, ha seguido la senda de los anteriores verdugos y antecesores. Zapatero-Aznar, y viceversa, firmaron acuerdos europeos que harían del futuro un gran Campo de cultivo para que las políticas Bancarias sembrasen la semilla del caos social.
Todos hicieron “Mutis por el Foro”, y ninguno ha salido a la Palestra a contar el porqué de tanto lodo, pues si lo hicieran tendrían que recordar a la sociedad que clase de verdugos fueron y los motivos por los que “desaparecieron” del panorama.
Hicieron la herida, pero no proporcionaron las gasas, ni las vendas que parasen la hemorragia. Ahora, tras el desangrado, cada uno se oculta en su guarida, viendo al último verdugo “desollar” a las víctimas mansas y resignadas que se presentan ante el mundo como el gran rebaño apaleado español.
Sumisos por el miedo a perder lo poco que les quede, felicitados por el verdugo por su “buen comportamiento”, el rebaño salió a las calles a gritar desconociendo que el “verdugo” era inocente. Pero inocente ¿de qué?.
Inocente de ser la Marioneta de esas élites europeas y Bancarias que han hecho un tanto de los mismo con los antecesores del último verdugo.
El silencio y la mentira, forman parte de sus políticas, porque el éxito radica en ocultar el antes, el durante y el después de todas esas políticas de “pasillo oscuro” firmadas por gobiernos esclavos de la Gran Madre Bancaria internacional, bendecida por estamentos como EE UU o el mismo Vaticano.
El futuro ha sido sentenciado a lo largo de sendas Legislaturas PP-Soistas, como se suele describir al Binomio del gran desastre, pero habría que analizar el tipo de sangre que sigue manando de la herida para saber si el donante debe o no ser solidario con la víctima, o si por el contrario, no transmitirá algo mortal con su donación.
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