En el siglo de las comunicaciones, iconos y logos que vemos todos los días en nuestras pantallas parecen estar rindiendo un tributo nada sutil a la sociedad secreta menos secreta de todas.
Una de las características fundamentales de la Masonería estriba en el uso del símbolo como canal de comunicación. Así, más allá de su significado inmediato y obvio, simples imágenes se transforman en símbolos portadores de una conexión entre el hombre y el principio que representan y del cual emanan. De igual manera, las compañías que dominan el mercado recurren a una filosofía acorde a la hora de diseñar sus logos o íconos. A continuación expondremos algunas imágenes asociadas con tres de las compañías más dominantes del mundo tecnológico y su equivalente o posible referente masónico.
Facebook
Es la red social más famosa de todas y, últimamente, también la más polémica debido a sus políticas restrictivas con algunas publicaciones y a la fuga de información personal a terceros con fines comerciales y políticos. Su isotipo es una letra «f» perdida en un mar azul cuadrangular. Uno bien podría decir que no es una obra muy pensada y es más bien simplista o minimalista.
Sin embargo la posición de la letra, descentrada, y el hecho que sea minúscula, puede tener un significado que no es para nada simple y estaría rindiendo tributo a un símbolo masón muy conocido dentro de las logias: Two Ball Cane, una alusión a «Tubalcaín», nada más y nada menos que un personaje bíblico.
Izquierda: Símbolo ‘Two Ball Cain’. Derecha: Isotipo de Facebook más el ícono de ‘Me gusta’.
Tubalcaín o Túbal Caín es el nombre del hijo de Lamec y Zillah. Debido a que su función en el mundo fue hacer la vida más cómoda, se considera que los cuatro hijos de Lamec, entre ellos Tubal Caín, son los padres de distintas artes y oficios, al empezar a desarrollarse la civilización. Tubal Caín es considerado padre de la metalurgia y por tanto de las artes vinculadas con el fuego y su poder de transmutación, lo cual hay que entender tanto en su sentido físico como espiritual. El uso de las palabras Túbal Caín como significativas en el ritual masónico se deriva de la Leyenda del Gremio —donde se lo denomina «el fundador del gremio de herreros»—, por medio de la cual el nombre se hizo común entre los Masones Activos y Especulativos; y se refiere simbólicamente al trabajo de la búsqueda de la Luz.
El nombre es utilizado como palabra clave entre Maestros Masones (grado 3). En el símbolo masón se ve un bastón con dos esferas a los lados, de allí que en inglés sea llamado vulgarmente Two Ball Cane, un simple juego de palabras que fonéticamente evocan el nombre del hijo de Lamec. Aunque su significado puede ser mucho más profundo, de hecho las esferas forman entre sí el símbolo del infinito, un número ocho acostado, y Tubalcaín es la octava generación.
Pero aún hay más, si seguimos por la vertiente numerológica, podemos vislumbrar una suerte de «007». Y de hecho, el primer agente «007» de la historia, un tal John Dee, firmaba sus cartas para la Reina Elizabeth con dos círculos que representaban unos anteojos, indicando que él era los ojos secretos de la Reina. Los dos círculos estaban bajo lo que parece ser un signo en escuadra (quizá relacionado con la expresión masónica «estar en la escuadra») o bien un número siete alargado, de donde se desprende la cifra «007» que para Dee era considerada una cifra cabalística con cualidades que la hacían especialmente interesante. El isologo de Facebook no será «los ojos secretos de la Reina»… pero seguramente aspira a ser los ojos secretos del Gran Hermano —si no es que ya lo es—.
Gmail
Aquí vemos el ícono del servicio de correo electrónico de Google, probablemente el más usado del mundo. A primera vista no parece más que un sobre cerrado, pero en una inspección más meticulosa apreciamos que las líneas rojas (y el color no es casualidad) que cruzan y recorren los pliegues forman una «M»… ¿de Mail tal vez? Puede ser. Pero resulta llamativa su similitud con el clásico mandil masónico, un trozo de tela que se sujeta al cuerpo a la altura de la cintura por medio de una cuerda o cinta.
Izquierda: Imagen de mandil rojo del Rito Escocés Antiguo. Derecha: Ícono de Gmail.
Ahora bien, por lo que respecta a las enseñanzas e interpretaciones simbólicas en Masonería, el mandil tiene su origen desde las más antiguas costumbres hebreas y egipcias, en donde en principio se adoptó, para ser usado durante los trabajos materiales de edificios, monumentos, templos y demás construcciones de arte en materia de arquitectura. Actualmente es usado por los iniciados masones. Pero tenemos también la interpretación moral del mandil, en el sentido de que el TRIÁNGULO es alegórico del ESPÍRITU HUMANO, que el CUADRADO representa a la MATERIA o al CUERPO del Iniciado, y el CÍRCULO que forma la cinta alrededor de la cintura del Aprendiz es emblemático de la PUREZA y la Sencillez de las acciones del hombre en relación a sus actos, y sobre todo, de acuerdo con su dedicación al tratar de conocer el origen de la CREACIÓN y todos sus fenómenos. Haciendo honor a su función principal, la aplicación realmente nos estaría enviando un muy poderoso mensaje a todos los que diariamente tocamos su icono para revisar el correo.
Google Play
El icono de Google Play o Google Store, la tienda donde se descargan todas las aplicaciones oficiales para el sistema operativo Android, es una flecha apuntando hacia la derecha. Y hasta aquí nada raro, el viejo y conocido botón de reproducción (Play). Sin embargo, nuevamente tenemos unas caprichosas líneas que se apoderan del diseño y nos quieren decir algo más… siniestro.
En la comparación de arriba, vemos a un costado el Sigilo de Lucifer, también conocido como el «Sello de Satán», un símbolo utilizado mayoritariamente por los satanistas. La imagen data del siglo XVI, según el Grimorium Verum, un libro que muestra y explica como se llevan a cabo los pactos con espíritus, la gran diversidad de fórmulas mágicas y el papel que desempeñan los sellos.
Se cree que el libro fue escrito por un egipcio de nombre Alibeck. Antiguamente se utilizó para ayudar a una «invocación visual del ángel Lucifer». El símbolo contiene varias características que muy poco se saben con certeza. No obstante, los de Google Play no habrían reparado mucho en utilizarlo —eso sí, acostado para que no sea tan evidente— con la excusa que las líneas ofrecen una división donde proyectar los varios colores que caracterizan al logo principal de la compañía.
Google Chrome
Esta comparación, hay que admitir, es algo forzada, pues podría tratarse también de un «999», que sería en contraposición el «número de Dios». Aunque si consideramos lo que venimos viendo, cualquiera se inclinaría más a relacionar el isotipo de Chrome con el bíblico número de la Bestia. No se puede negar que ya nos ha marcado a todos…
Apple Store
Apple no se anda con chiquitas y el ícono de su tienda de aplicaciones es bastante explícito. Directamente nos remite al símbolo por excelencia de la Masonería: el compás y la escuadra… al menos hasta el año pasado, cuando la compañía que perpetuó el eterno Steve Jobs decidió hacer, tras muchos años, una «refrescadita» y simplificarlo.
Simbolo masón (izquierda), ícono de Apple Store antiguo (centro), ícono de Apple Store actual (derecha).
Bien uno puede decir que es la «A» de Apple, formada gracias a un lápiz y un pincel que tocan sus extremos posteriores en un ángulo de 60 grados y atravesados por una regla. El símbolo masón sigue un diseño similar, pero los útiles utilizados son la escuadra (símbolo de la virtud) y el compás (símbolo de los límites con los que debe mantenerse cualquier masón respecto a los demás). La «A» que se dibuja en esta ocasión desde luego no es de Apple, sino de «Arquitecto», más específicamente el «Gran Arquitecto del Universo». No se puede negar que Apple ha contribuido de manera significativa a la Arquitectura del mundo cibernético actual.
Conclusión
Como hemos visto, las similitudes entre las imágenes representativas de compañías famosas y la simbología masónica nos hacen preguntar si se trata de una simple casualidad arquetípica, de nuestro cerebro viendo patrones donde no los hay, o de si realmente son «sutiles» alusiones a las preferencias filosóficas de sus amos. Aunque si hablamos de sutilezas, no podemos dejar de lado la última de Taco Bell —que no tiene nada que ver con la tecnología pero que sirve de buen ejemplo para finalizar este artículo—.
No deja lugar a la imaginación, ¿verdad?
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