El vehículo de propósito especial INSTEX tiene como objetivo facilitar el comercio entre la UE e Irán para sortear las sanciones estadounidenses. DW examina cómo funcionará, los jugadores y su posible impacto.
El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Heiko Maas, a la derecha, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Jean-Yves Le Drian, a la izquierda, y Jeremy Hunt, el Secretario de Estado para Asuntos Exteriores y de la Mancomunidad del Reino Unido, anuncian el mecanismo especial de la UE para el comercio con Irán el 31 de enero de 2019 / Foto por AP
Alemania, Francia y Gran Bretaña han lanzado un sistema respaldado por la Unión Europea para facilitar el comercio con Irán para ayudar a las empresas europeas a sortear las sanciones unilaterales de Estados Unidos a Irán.
El Instrumento de apoyo a los intercambios comerciales (INSTEX) se registró después de meses de negociaciones y conversaciones técnicas a raíz de la salida unilateral de la administración Trump el año pasado del acuerdo nuclear de 2015 con Irán. Ese pacto, acordado con el ex presidente Barack Obama, levantó las sanciones internacionales a Irán a cambio de que Teherán impusiera restricciones a su programa nuclear.
El Instrumento de Apoyo a los Intercambios Comerciales (INSTEX) es un vehículo especial (SPV) establecido en enero de 2019 por Francia (Alemania) y el Reino Unido para facilitar el comercio no monetario con Irán. El SPV tiene su sede en París, Francia y está dirigido por el ciudadano alemán Per Fischer, quien anteriormente se desempeñó como Jefe de Instituciones Financieras en Commerzbank, entre 2003 y 2014.
¿Como funciona esto?
La nueva entidad actúa como una especie de cámara de compensación denominada en euros para que Irán realice transacciones comerciales con compañías europeas. En efecto, INSTEX funciona como un acuerdo de trueque que opera fuera del sistema financiero global dominado por los Estados Unidos. Inicialmente, se espera que el comercio se centre en bienes esenciales no sancionables, como productos humanitarios, médicos y agrícolas. No se espera que aborde las transacciones relacionadas con el petróleo, que han disminuido desde el año pasado y son la principal fuente de divisas extranjeras de Irán.
¿Quien esta implicado?
Como los signatarios europeos del acuerdo nuclear, Alemania, Francia y Gran Bretaña establecieron y administrarán la cámara de compensación. La entidad tiene su sede en Francia con el gobierno alemán y el apoyo financiero de los tres países. Los tres países han buscado un apoyo más amplio para el mecanismo de los 28 estados miembros de la UE para demostrar la buena fe europea en la implementación de los compromisos en virtud del acuerdo nuclear y presentar un frente unido contra cualquier represalia de Washington.
¿Funcionará?
Todavía hay detalles técnicos que deben elaborarse después del registro oficial de la entidad.
En teoría, el canal de pago protegería a las empresas europeas de las sanciones relacionadas con las sanciones de EE. UU. Sin embargo, las compañías y los bancos europeos que hacen negocios con los EE. UU. Todavía pueden dudar en comerciar con Irán debido a las preocupaciones de que puedan recibir sanciones de los EE. UU. Muchas empresas europeas ya se han retirado de Irán en respuesta a las sanciones de Estados Unidos.
La entidad está inicialmente dirigida a pequeñas y medianas empresas europeas y es probable que el volumen de comercio siga siendo pequeño.
La facilitación por parte del vehículo de pago del comercio de productos esenciales no sancionables plantea dudas sobre si beneficiará lo suficiente a la economía en dificultades de Irán y lo ayudará a frenar la inflación desenfrenada y la devaluación de la moneda.
Respuesta de Estados Unidos
Estados Unidos se ha comprometido a continuar su campaña de "máxima presión" en Irán por su programa de misiles balísticos y su creciente influencia en el Medio Oriente. La Casa Blanca advirtió a los bancos y empresas europeas que podrían enfrentar multas y sanciones severas si violan las sanciones de Estados Unidos. Sin embargo, es cuestionable si Washington se dirigiría directamente a los gobiernos europeos que respaldan a la nueva entidad, una medida que tensaría los lazos con aliados clave y provocaría turbulencias financieras.
La respuesta de iran
Teherán se ha sentido frustrado por la lenta respuesta europea a la reimposición de las sanciones de EE. UU., Pero se ha comprometido a mantener los compromisos de su acuerdo nuclear siempre que reciba los beneficios económicos prometidos.
"Si no podemos vender nuestro petróleo y no disfrutamos de transacciones financieras, entonces no creo que seguir beneficiándonos", dijo Ali Akbar Salehi, jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán, a principios de enero.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, está bajo la presión de los empleados de oficina y de seguridad para que salgan de un acuerdo al que se opusieron desde el principio. A falta de beneficios económicos, quedan dudas sobre cuánto durará la paciencia de Irán.
Irán también está mirando a Rusia y China, los otros signatarios del acuerdo nuclear, para mantener los flujos comerciales en desafío a los Estados Unidos. El comercio de petróleo con China se ha reducido en los últimos meses, alcanzando un mínimo de tres años.
Las sanciones estadounidenses contra Irán apuntan al comercio de oro y metales preciosos de Teherán, bloquean las ventas de aviones de pasajeros y restringen la compra de dólares estadounidenses por parte de Irán, entre otras medidas punitivas. Estados Unidos también ha bloqueado las ventas de petróleo clave de Irán en otro tramo de sanciones, que entró en vigor en noviembre de 2018.
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