LA ZONA ANIMAL : 86 Balas para Tyke

La trágica historia de Tyke el elefante, empezó en 1974. La hembra era todavía un bebe cuando fue arrancada a su familia en África y llevada a los Estados Unidos.

La vida de Tyke se convirtió en un infierno, el infierno del circo, el encerramiento a vida, el sufrimiento, el abuso, la sumisión iban a ser parte de su vida.



A su llegada en el circo Hawthorn Corporation (conocidos por sus numerosos antecedentes de crueldad hacia los animales) fue encerrada en una habitación de cemento y golpeada repetidamente, para obligarla a someterse.

Los entrenadores del circo golpeaban con un pico de metal (bullhooks) en las zonas mas sensibles : detrás de las orejas, en la parte superior de los dedos del pie, detrás de las rodillas y alrededor del ano. Tyke lloraba de dolor. Querían hacerle daño para que ella obedeciera  y que tuviera definitivamente miedo a las represalias. 

EN junio 1988, según los documentos de l'USDA (Departamento Federal de Agricultura), Tyke fue golpeada en publico por Juan Caudillo, su entrenador. Gritaba, y tenia que mantenerse sobre tres patas para evitar los  golpes. Así que el elefante era tan temeroso que se ponía a gritar y a intentar escaparse a la sola vista del guardia.


John Cuneo de Hawthorn Corp es propietaria de los animales exóticos como tigres blancos. | Michelle LaVigne ~ Sun-Times Media

Tyke pasaba la mayor parte del tiempo encadenada sin hacer nada. La falta de practica de ejercicios heria sus articulaciones. Su dieta era monótona  Estaba de pie en el lodo y los excrementos. Era privada de todos los aspectos de la vida normal de un elefante. El tiempo pasaba, su sed de libertad aumentaba e iba a manifestarla.



EL 21 de abril 1993, mientras actuaba para el circo de los Shriners, Tyke intento escaparse por la puerta  de la pista, en Altoona, Pennsilvania. Arrancó una parte de la estructura de la tienda, y corrió fuera de control durante une hora, causando el pánico entre los 3000 niños presentes e hiriendo a una niña. El elefante persiguió a su entrenador y John Cuneo, su propietario. Luego llegó a un palco donde estaban sentados los espectadores y volvieron a llevarla a su cuarto.



EL 22 de abril 1993, según una declaración conseguida por USDA, Tyke atacó al entrenador de un tigre.

El 23 de julio 1993, Tyke intento otra vez liberarse, sin éxito  en la feria de Dakota del Norte en Minot. Pisoteó e hirió a un empleado de la feria, asustó a la muchedumbre y se escapó durante 25 minutos antes de ser capturada.

El USDA no sancionó al circo, después de esos incidentes.

Tyke se convirtio en una amenaza evidente para el público pero Hawthorn Corp ne queria que se retirara.

Durante el año siguiente, Tyke continuó actuando en el circo y vivía encadenada en un hórreo de cemento, entre los espectáculos  Los golpes de Bullhook continuaban. Su vida era insoportable, entre terror y aburrimiento.

El 20 de agosto de 1994, Tyke ya no podía mas. Llevaba ya 20 años en ese circo, estaba cansada de ser golpeada y humillada  Ya no podía aguantar el dolor y el encerramiento. Estaba furiosa y quería ser libre.


Los Bullhooks son varillas con extremos puntiagudos de acero sólido (parecido a un atizador de la chimenea), que están específicamente diseñados para infligir dolor. 

Esa tarde del 20 de agosto, en el Centro Neal Blaidsell en Honolulu (Hawai), la vida de Tyke iba a cambiar, durante su última actuación (para el circo de los Shriners).

Cuando llegó a la pista, Tyke, loca de ira, mató a su entrendador Alan Campbell e hirió a su cuidador Dallas Beckwith, delante de una multitud de espectadores aterrorizados. El elefante, impulsado por la ira y la frustración acumuladas, durante esos años, huyó por las calles de Kakaako, embistió a los peatones, aplastando coches e hirió a Steve Hirano, un periodista intentando en vano pararla.



Su libertad duró poco. Treinta minutos mas tarde, Tyke fue detenida en su carrera por los policías  y matada en plena calle, por mas de 85 disparos, ante la mirada de numerosos mirones chocados  Murió de lesiones múltiples y de una hemorragia cerebral.

Tyke se convirtió en un símbolo de los derechos de los animales. Docenas de procesos fueron intentados contra la ciudad, el estado, el circo y el dueño de Tyke, John Cuneo. 

William Fenton, un abogado de Honolulu, persiguió con éxito a Cuneo en nombre de numerosos demandantes de Honolulu (incluidos niños) que sufrieron daños psicológicos causados por la matanza publica de Tyke.



Ninguna representación tuvo lugar en Honolulu después de este incidente.

La ultima imagen que se conservara de Tyke, es su cuerpo sin vida, sobre el alquitrán caliente de una ciudad americana, aun ataviada con la cofia del circo acribillada de disparos. Este disfráz representa una forma de insulto y ridículo hacia este noble ser, que supo mostrarnos su ánimo. Este es el uniforme de la servidumbre, que tuvo que llevar hasta en la muerte.



Uno de los Circos en Gira por España, paseaba sus atracciones por la provincia de Huelva. En este caso, sus responsables argumentaban "no maltratar a sus animales en ensayos". En la imagen, una de las visitas del Circo con animales en La Palma del Condado, Huelva.












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