La Mano Negra era una sociedad secreta andaluza en la España de finales del s. XIX que atentaba contra la vida e integridad de una burguesía opresora, cargada de misterio y temor. Se la presentaba como un grupo armado que no tenía problema en recurrir al asesinato para imponer sus ideas.
Esta sociedad secreta supuestamente estaba constituída por obreros de ideas anarquistas que se rebelaban ante el sistema de trabajo esclavista que mantenían los latifundistas en la Andalucía de finales del s. XIX. Tomando actitudes extremistas y recurriendo al terrorismo, atentando tanto contra los cultivos como contra la vida de sus “enemigos”.
Los orígenes de la Mano Negra se datan en el año 1881, época de malas cosechas y de hambre para los jornaleros, por lo que existía mucha tensión social. Entonces se constituía la Federación de Trabajadores de la Región Española (FTRE), de filosofía anarquista. Y la Mano Negra, supuestamente, surgiría como el brazo armado de ésta y otras agrupaciones obreras.
El Tribunal de Orden Público declara presos preventivos a asociados obreros.“La Ilustración Española y Americana”, 1883. Foto Montenegro.
Los supuestos atentados de la Mano Negra
El primer supuesto atentado se produce el 13 de agosto de 1882 cuando el guardia rural Fernando Olivera Montero, vecino de Arcos, presuntamente muere de un disparo. Aunque en principio se explicó que se disparó accidentalmente con su propia escopeta. Meses después un anónimo denunció que la muerte de Olivera se debía a una paliza que le habían dado miembros de la Mano Negra por negarse a formar parte de esta sociedad secreta.
Retrato de algunos de los implicados en la cuestión Mano Negra, según fotografía inserta en el informe publicado por M. Cubas en Madrid en 1884.
El siguiente atentado atribuido a La Mano Negra se produjo el 4 de diciembre de 1882 en la madrugada, efectúando los asesinatos de Juan Núñez Chacón y su esposa, María Labrador, propietarios de una pequeña venta en el camino de Jerez a Trebujena. El crimen presuntamente fue cometido por 6 miembros de la Mano Negra, de los cuales murió uno de un disparo defensivo del ventero, los restantes fueron detenidos al día siguiente.
El tercero y más famoso supuesto atentado fue el asesinato de Bartolomé Gago de los Santos alias “Blanco de Benaocaz”, entre finales de noviembre y principios de diciembre de 1882, en el llamado cortijo La Parrilla, en Jerez. Lo cierto es que las causas del asesinato se presentaban confusas. Los acusados confesaron pertenecer a una asociación de trabajadores vinculada a la FTRE, pero en ningún caso a ninguna sociedad secreta.
Francisco Corbacho (izquierda), acusado de presidir el Tribunal Popular y de proponer la muerte de “El Blanco de Benaocaz”. Pedro Corbacho (derecha), acusado de los mismos delitos. Fotos tomadas en 1883 por el gabinete fotográfico de G. A. Montenegro, sito en la calle Larga número 15 de Jerez.
Por último, el supuesto atentado que culmina con la lista de crímenes atribuídos a la Mano Negra es el más insustancial si cabe. Es el de “La Posada de Cuatro Caminos” a 2 de abril de 1883, donde cuatro hombres asesinan al ventero Antonio Vázquez; éstos son detenidos poco después. El móvil es, claramente, el robo, pero enseguida cayó la acusación de pertenecer a la ya famosa y temida sociedad secreta.
Los Juicios a la Mano Negra
Los acusados de los atentados supuestamente cometidos por la Mano Negra fueron juzgados. Estos juicios se fueron celebrando a lo largo de 1883. Fueron procesos llenos de inconsistencias para convertir lo que, probablemente, eran crímenes comunes aislados (posiblemente propiciados por el hambre en los campos) en un complot de la Mano Negra.
La prueba presentada por las autoridades consistía en la existencia de un manuscrito con el reglamento de esta sociedad secreta. Encontrado por los agentes de la Guardia Civil en el campo bajo una piedra, algo un tanto inverosímil. Pero estas causas contra la Mano Negra prosperaron llegando a 15 condenas de muerte, siete de ellas se llevaron a cabo en la Plaza del Mercado de Jerez de la Frontera, el 14 de junio de 1884 mientras solo tres días después los jueces gozaron de la Gran Cruz del Orden de Isabel la Católica.
La cuerda de presos sale de la antigua cárcel de Jerez ("Ilustración Española y Americana" 1883, por J. Comba, de fotografía de Montenegro).
Ya en la época, intelectuales y destacados miembros de la sociedad española decían que la Mano Negra no existía y que era un montaje con el fin de desprestigiar los pujantes movimientos obreros que surgían a la sombra de la explotación sufrida por los jornaleros en el campo andaluz.
La cuerda de presos acusados de pertenecer a la "Mano Negra" es conducida a la cárcel de Cádiz
Como el periodista y cronista de Jerez, Manuel Cancela, que escribió su opinión al respecto en la guía de Jerez de 1884, en la cual asegura: “La Mano Negra propiamente dicha es un aborto de la imaginación”. También el político, periodista y escritor jerezano Ramón de Cala, en su libro “El problema de la miseria resuelto por la armonía” (1884), dice por ejemplo: “La Mano Negra es un mito, que no ha existido, ni existe”.
Aunque durante muchos años se ha discutido la existencia de tal supuesta organización, actualmente prácticamente todo el ámbito académico está de acuerdo en que fue un invento a la manera de la operación de bandera falsa o a modo de una imputación injustificada del gobierno de Mateo Sagasta para aplacar las revueltas en los campos del sur de España, como ya insinuó Vicente Blasco Ibáñez en su novela sociológica en 1905.
Es el tipo de maniobra de algunos servicios secretos que otros países han usado con las sociedades secretas.
Actualmente, se siguen realizando estudios sobre este tema (uno de los que destaca es el de Clara E. Lida, "La Mano Negra", 1972), en los cuales suelen imperar principios como el que se cita a continuación:
"Ese interés abrumador por imputar a los anarquistas cualquier crimen con el fin de deteriorar la imagen del colectivo ha sido una constante en la historia de este país y de cualquier país".
Juan Madrid, historiador y periodista, en referencia a Mano Negra.
Más:
Luciano Boada y Valladolid, presidente, y Manuel López de Azcutia, teniente fiscal del Tribunal Supremo fueron condecorados con la Gran Cruz del Orden de Isabel la Católica. Véase: Diario oficial de avisos de Madrid 17.6.1884 Año CXXVI num.169
La bodega
Diario bahía de Cádiz
La leyenda de La Mano Negra
Alegato del fiscal en el proceso de La Mano Negra
Sentencia del proceso de La Mano Negra
“Sociedades secretas, sectas y servicios secretos”.
Movimientos sociales en Jerez de la Frontera durante el siglo XIX
Atentados y magnicidios del siglo XX; de Sarajevo 1914 al 11-S
El Yunque, peligrosa sociedad secreta de ultraderecha
Andalucía, la imagen cartográfica, hasta finales del siglo XIX
Audiencia de Jerez de la Frontera. Proceso seguido a Cristóbal Durán Gil y Antonio Jaime Domínguez por asesinato de Fernando Olivera [1883]
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