La última droga de moda en EE UU, podría estar detrás del incidente ocurrido en Florida que terminó con dos víctimas mortales.
La mañana del sábado 26 de Mayo, antes de que protagonizara los titulares en todo el mundo por devorar la cara de otro hombre, Rudy Eugene o ‘el caníbal de Miami’ tomó una Biblia y besó a su novia. Cuando su novia lo vio hurgando en el ropero a las 5:30 a.m., dijo que iba a encontrarse con “un compadre”. No dijo el nombre del sujeto ni a donde iba.
La besó en los labios y le dijo “te amo”. Dejó el departamento en el condado de Boward, Florida. Tras pedirle que se cuidara, la mujer volvió a dormir, según contó a “Miami Herald”. Pensó que era inusual que dejara la casa tan temprano, pero no quiso presionar al hombre al que siempre llamaba “mi bebe” o “corazón”.
Más tarde, Eugene llamó a su móvil avisando que había sufrido una avería en su coche. “Volveré a casa, pero será tarde. Te llamaré”. Eso fue lo último que Eugene le dijo a su novia antes de morir.
La novia del “caníbal” no podía entender lo que estaba pasando, mucho menos su madre. Las últimas palabras de Eugene, antes de cometer tamaña acción al hablar con su novia fue que la quería mucho”. Lo que pasó después aún es una incógnita.
La Policía de Miami intentaba reconstruir las últimas horas de Eugene y los movimientos que hizo. Sí parece claro que la noche anterior estuvo con su novia celebrando el Memorial Day, y que después se fue a una fiesta en la playa.
Después, y probablemente bajo los efectos de la potente droga que supuestamente consumió y que se conoce en el mercado como 'sales de baño', Eugene inició a pie el camino de vuelta a su casa, a unos cinco kilómetros, y bajo una temperatura de más de 32 grados.
Ronald Poppo, la vícima. Abajo, las secuelas del ataque.
Pero al ver que no regresaba, la chica comenzó a preocuparse, y salió a buscarle."No podía hacer nada, estaba preocupada y le dejé mensajes en su teléfono móvil: Rudy, llámame, estoy muy preocupada".
Cuando llegó a casa por la noche, vio lo que había sucedido en las noticias:"Pensé, Dios mío, es una locura. No sabía que había sido Rudy".
El domingo, la joven continuó buscando a Eugene. El lunes, recibió una llamada de la familia del chico: "¡Rudy está muerto!". Entonces fue cuando se enteró de que Eugene era el caníbal de Miami que había atacado a Ronald Poppo.
La teoría de la novia de Eugene es la siguiente: lo drogaron sin que él se diera cuenta. Otra explicación que plantea es que “le hicieron un vudú”.
Ella, que prefiere no revelar su identidad, cuenta cómo conoció Eugene. “Era lindo. Lo conocí en una calle mientras había tráfico. Le grité mi número y me llamó. Hubo química de inmediato”.
Eugene trabajaba en una lavandería de autos y quería su negocio propio. Leía la Biblia a menudo. La llevaba a dondequiera que fuese. “Creía mucho en Dios”, cuenta, y además “repetía versos de la Biblia” a sus conocidos.
La madre de Rudy, por su parte, reveló a la policía que poco antes del espeluznante episodio su hijo habló con ella y la amenazó de muerte. “No sé qué le inyectaron”, dijo. Pese a esto, contó que su relación con su hijo era cálida y cercana.
Los caníbales se ponen de moda en EEUU: después de Miami, Baltimore
Mi hijo no era un caníbal
Caníbales que han conmocionado al mundo
En Facebook
No hay comentarios:
Publicar un comentario
DEJA TU COMENTARIO